El ruido de las palabras
llama a apagar el fuego,
pero a mas ruido
más fuego con ruido.
Vuelta y vuelta
la sortija sin agarrar
la mano vuela,
se queja por su suerte.
y habla de su suerte ruidosa
malos ruidos
mala suerte
malas palabras,
malos términos
sin terminar lo malo
muchos términos interminables
ruidos interminables
se mueren en su voz
su voz se desvive por vivir,
no importrando a quien matar.
Cubre mi silencio
ahoga mi silencio
me deja en silencio
pido su silencio
pero su silencio es ruido.
Y el principio de lo principal
pareciera ser que ya terminó.
El límite de su voz,
no tiene límites de sílabas,
sílabas agudas, graves
y gravementes esdrújulas.
Sin planteos concretos.
La normalidad de su ser
anormaliza mi mente
Juan Ricardo Sagardía
SANTOAMOR
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