miércoles, 29 de octubre de 2008

EL OTOÑO



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La otoñada llega cubierta de tristeza.
Los árboles agitan sus frondosas ramas
y un alud de caducas hojas se precipita.
Resecas lucen un tono amarronado,
opuesto al verdor de su apogeo.
Yacen esparcidas al pie del árbol
que las mantuvo prisioneras.
Aguardan impacientes que el viento
las lleve sin rumbo en libertad.

A orillas de un hermoso lago
me regodeo de mi otoño existencial.
Observo a lo lejos una hoja frágil
arrastrada por las aguas cristalinas.
Al deternerse enfrente quedo fascinada.
Irradia una alegría desbordante
y a voluntad la abordo de inmediato.

Ahora unidas navegamos por la vida.
Felices disfrutamos nuestro otoño,
como en el resto de estaciones.

©SKORPIONA
Inés de la Puente Spiers
http://www.skorpiona.com/el_otono.htm
http://skorpiona.webcindario.com/el_otono.htm

DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS

Momento


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Donde estás delineando el horizonte,
allí termina el mundo;
allí se acaba el eco de la sombra,
allí se desmenuzan la palabra y el verso.
Te sigo posponiéndome la pena,
desglosando el instante,
dando al aire
la dimensión sin pausa de tu huella.
Me hablas y te escucho y me arrepiento
de no saber robarte otro segundo,
de no poder quedarme
sin el pretexto tonto de un pretexto.
Y te vas,
desangelando el próximo minuto
mientras te miro oscurecer los soles
y desgarrar el alba
con un gesto.

Cristina Longinotti

martes, 28 de octubre de 2008

Buscando el aire

Epigrafeando a Amparo-revival

“Me diste un soplo de niebla rota”
Amparo Carranza Vélez


Actores sin letra


Actores sin letra
de un monólogo absurdo,
los pulmones colapsaron rebelados
al viciado aire que desprendías.
Un soplo de esperanza hubiese bastado
para insuflar la vida que ya ajena les era,
una leve brisa que oreará sus pliegues
los hubiera resucitado,
una lágrima de éter genuino
cayendo en sus orillas
fuese más que suficiente respiro
y motivo de existencia.
Resecos, marchitos,
durmieron su ahogo por siempre.
Jamás supieron que tu aire no era el de ellos.


Liliana Varela 2008

domingo, 26 de octubre de 2008

LLUEVEN ESTRELLAS.



Llueven desde el infinito
millares
de puntos de luz.

Llueven seres sutiles
de mundos estelares.

Sueñan con un sueño de paz.
Lloran por un sueño de mar.
Las alas tienen escamas de oro.
Bajan desde el cielo,
para posarse levemente sobre mí.

Llueven pequeños diamantes de agua.
Recorren sin pudor cada parte de mi piel.
Me empapan.
Me impregnan con olor a lluvia,
a tilos, a miel.

Llueven ánimas leves
de mundos eternos.
Desde los azules océanos del cielo.

Las nubes describen la escritura de mi fe.
Sueñan las estrellas con mis besos de amor.
Recuerdan el llanto del violín y del viento.
Recuerdan el sonido creador.
Dibujan la maravilla al fin.

Llueven besos distraídos y ciertos.
Llueven de mis labios.
Hasta posarse aleatoriamente sobre cada parte de ti.

Amparo Carranza Vélez.
21 de Octubre de 2008.

Esa especie de tajo

..........................Eres tú
................................de espada, de jade, marfil y canela
..................................................................Liliana Varela



Eres el que descuartizó la noche
..........por azotar la playa inalcanzable
.......................en brutal cosecha de cegueras


lejana tempestad antártica
..........pájaro que enmudeció de ira
.......................y petrificó su rama en el pinar


soliloquio de silenciosncios que deshojó el arce
.........trémula rosa amarilla en un escrito
.......................lágrima seca en el adiós.



Eres el que sublevó al grito
..........y quebró lo fugaz de los instantes.

........................Sólo canela y filo.


................diana poblet -

sábado, 25 de octubre de 2008

Sintió


“Sintió en las manos curtidas de tiempo que algo palpitaba,
que un pedazo de algo seguía vivo”
....................................................Migdalia Mansilla Rojas


Necesitó la luz del día para comprender el azul
para entender que nada era consecuencia
pero sí efecto,
Asomó a los labios el latido dormido tanto tiempo
y fue alba la última gota de rocío.
Persignó de rosas los presagios
fundiendo el plomizo pasado
bajo llaves de olvido-comienzo.
Ahora sabía-intuía
que podía brotar en su alma la primavera
aunque fuese invierno
en aquel espejo burlón.


Liliana Varela 2008

miércoles, 22 de octubre de 2008

PURA





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Puedo atraer
un beso de amor
a mi nostalgia.

Un abrazo nocturno,
una caricia sacra,
sostener tu mentón
con mis ojos.

Es que:
en mis manos
y mi piel,
el recuerdo de tu amor
alimenta lo ficticio.

Te quedaste en mí,
te quedaste en silencio.

Y yo desde mi centro
aún oigo tu garganta
negando el te quiero.

Pero aún así
puedo sostenerte
intacta y sin mácula,
entre todos mis recuerdos.

SANTOAMOR

Así en la tierra como en el cielo

Rugió el tiempo una vez:
el calor inicial de su estallido
forjó mis ilusiones,
mis amores,
mis sueños, mi esperanza,
mis sentidos.

Rugió el tiempo otra vez
y el estertor final de sus gemidos
vomitó mis temores,
mis fracasos,
mis errores, mis dudas,
mis olvidos.

Da lo mismo la luna que su sombra.
Si estás. Si estoy.
Si no.
Si ya nos fuimos.

Cristina Longinotti

lunes, 20 de octubre de 2008

AFECTADO

Quiebro la fronteriza distancia,

el lienzo puro se cuarteo

con la despedida de tu espalda.



La posibilidad de no tenerte

me dejó encerrado: en aquella celda

que yo mismo construí

para desaparecer del mundo.



Enfrente: tu ventana

donde por las noches

me trae el movimiento

de tu pelvis, con el largo de otro.



Temblor, vibraciones,

que te sepultan luego del éxtasis,

para volver a recomenzar.



Me he convertido en un mirón subterráneo

al que no ves, y lo haces ver,

mis ojos son pura convulsión de asco trágico,

el fluido de esos ardores

me dejan a la deriva,

no tienes memoria de que ayer nomás

decías yo ser lo eterno.



Solo espero

que acabe para ti la inmortalidad,

el hierro marcara el tiempo

y solo serás un delirio al cual nadie le pondrá precio,

pues mataste la virtud de ser un ave angelical.





Juan Ricardo Sagardía

SANTOAMOR

viernes, 17 de octubre de 2008

Cuando pienso en ti





Cuando cierro los ojos y me pongo a pensar
en medio del universo de sensaciones
que me provoca pensar en ti y solas,
comparo tu mirada con la luz de las estrellas
y encuentro que cuando miras se rompe soledades
como rompen soledades la luz de las estrellas.

Encuentro que tu voz resume la belleza
de todos los sonidos de la tierra:
como el canto de las aves, el rayo o el
majestuoso sonido del mar y de las olas.

Y encuentro, sobre todo a ti, mujer, mi compañera,
la criatura más perfecta para mi en esta tierra

Guzmán Lavenant

miércoles, 8 de octubre de 2008

Trote añejo o Shiss Shiss Shiss.

Trote añejo
al borde de esa aurora
Sombras
de oído sordo
Sombras
de historia loca.
Mi teléfono
suena
lo veo ahí en mi vieja
mesa de noche
Está triste
suena
y no respondo.

Julia del Prado
Jesús María (Lima) 12.09.2008
http://eltuturutude julie.blogspot. com

martes, 7 de octubre de 2008

ANGUSTIA



hay vacío de palabras
pluma sin tinta
dolores añejos
lágrimas perdidas
algún orificio
................pecho desierto

hay premura de ausencia
congoja de "sin"
portada en blanco y negro
algún sollozo escatimado
en la tardía noche
................un recuerdo

Elisabet Cincotta
derechos de autor registrados

CASI VOCES

casi voces murmullos
-resplandores azules-
lunáticos/envolvente s
amaneceres replegados
en soledades

casi voces austeras
precisas/silentes
cenit lujurioso
en la almohada
que susurra movimientos
atardeceres tibios
de melancolía

casi voces en la noche
que se acercan a tu orilla
manos/piel/carmines pasionarios
y en la oscuridad tu mano
siempre fría

Elisabet Cincotta
derechos de autor registrados

lunes, 6 de octubre de 2008

POR SI FUERA POSIBLE




Quedan las cicatrices
pero una voz ampara
a los que están desiertos
y resuena el silencio de todo lo perfecto.

En el tiempo del agua y de la tierra,
de los dorados frutos y los huertos
eras el jardinero bendecido
por el soplo de luz y las estrellas
consteladas en torno a tu armonía
fraguaban tu corazón con pulso cierto.

La sangre no era entonces sino vino festivo,
alegre compañero de la poma
que pendía madura con su misterio adentro.

Ahora que canalgan sobre el barro
los hijos de los hijos, y nosotros,
desertores del siglo que nos lleva,
tentamos en la sombra la luz de la palabra
que se ha llevado Eros n su carcaj de plata,
ahora que en Olimpia y en Megara
queda el eco del mármol silenciado,
nosotros, los huídos, reiteramos el beso,
el pálpito, el abrazo, la memoria
del hombre antes del hombre, ya concluso
por si fuera posible renacernos.

Long-Ohni__._,_.___

jueves, 2 de octubre de 2008

Mujer nube

Mansa e incansable

Como la lluvia que la moja

deambula por el muelle

buscando inútilmente respuestas en el cielo.

El espiral de la soledad

se enreda entre sus pies

y trastabilla la cordura.

Se quiebra el bramido del mar

en el último soplo del viento

mientras ella se disipa junto con la niebla.

Su mirada insolente baja hasta la playa,

descubre su sombra espumosa en la arena

y unos pasos más allá

su cuerpo desnudo en la orilla

rodeado de velas y pájaros muertos.



Patricia Ortiz
--
"no comparo / simplemente doy mi fruto / y espero / la semilla más humilde / puede brotar el fuego o la hermosura." Roberto Santoro.

De poetas y locos

Dije que no estás
y mis brazos se colmaron de rosas sin espinas
asépticas insolentes tiesas
escapadas de rosales del barrio
huían de floreros acristalados para refugiarse aquí,
en nuestra casa
a salvo de velatorios y misas lánguidas
desmayando en la prisa algún pétalo.

Dije que no estás
y un carpintero taladró ante mí
sobre el tronco del castaño, justo ahí,
adonde solíamos sentarnos por la tarde.

No quiero alucinar
ni acumular señales en buen uso
pero algo de razón tendrán
las rosas y los pájaros.


diana poblet -
del libro (entre paréntesis)

ARREBOLES

Un cariño de arreboles
mi barrio despierta.
El amanecer cansino de veredas
destila tilos y tu mano
-amurada a mil tristezas-
se detiene entre mis quejas.

Un abrigo matutino tu brazo sueña
y es mi sien -clavel- quien acepta
un paseo / un café /
un recuerdo y una promesa
de jacarandás que incitan
el arrullo de palomas entre la arboleda.

Elisabet Cincotta
de "De laureles y olivos"