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domingo, 31 de mayo de 2009
AGONÍA
Desde el fondo de los tiempos--. Desde el fondo.
Esa mueca sombría delimita
Las fronteras del hoy y del pasado.
Nada ha cambiado, pero ha terminado
Una ilusión, sin vallas, infinita.
Me miro y veo la herida.
Un rictus tu mirada.
Murió y no queda nada
Lo que era amor, no es vida.
No me odies, no es mayor la culpa mía.
Ni es la tuya, negándote al futuro.
Sólo mudó valor en cobardía,
Había luz, y todo se hizo oscuro.
Hoy terminamos, a cada cual su sino.
¡Qué soledad! ¡qué nada! ¡qué vacío!
El mundo es amplio, pero no hay camino
Pues lo hice para ti, amor, triste amor mío.
© Carlos Adalberto Fernández
Ahì, en tu historia...
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Tus ojos se pierden,
en un ocaso diferente
al mío.
En otro paisaje
que no me pertenece.
Con otro
tren de historia,
tal vez llegue a tu memoria,
otra historia,
que poco tiene que ver
con ésta, tan mía…
No importa,
tu centro perfecto
de ser y esencia,
clara y precisa,
me conoció
en una tarde…
Y quedaron escritas
unas estrofas,
únicas,
que son las Mías!...
Diana Bracamonte©
en un ocaso diferente
al mío.
En otro paisaje
que no me pertenece.
Con otro
tren de historia,
tal vez llegue a tu memoria,
otra historia,
que poco tiene que ver
con ésta, tan mía…
No importa,
tu centro perfecto
de ser y esencia,
clara y precisa,
me conoció
en una tarde…
Y quedaron escritas
unas estrofas,
únicas,
que son las Mías!...
Diana Bracamonte©
Traición
Apenas la noche abre sus fauces
y la tristeza me abraza como un niño muerto.
Recuerdo tu serenidad tendida en la sobremesa
tus ojos como dos frutos a la espera
un roce suspendido en los almendros
un beso sin destino bordado en la servilleta.
Oí tu voz como un naufragio
mientras la lluvia afuera destilaba su agonía
y los árboles crepitaban su amargura.
En ese instante éramos como una barca perdida en el paraje
como dos sombras que se miran en la muerte.
Cuánta tempestad después de una traición no concedida
cuántas palabras como dardos en invierno.
Dijiste un nombre que no era el mío
abriste tu corazón sin saber que su murmullo
deponían mis alas al vacío y la derrota.
Un silencio se interpuso en nuestras soledades
y me vestí de luto ante tus pupilas
sólo faltó la tierra que me sostuviera.
Lady López, 2009.
http://ladylopez954 .blogspot. com/
sábado, 30 de mayo de 2009
DÍAS LENTOS
El viento está enyesado,
la tarde lo espera...
No han vuelto a conversar
como en los viejos tiempos.
Piensa él que ya nada
a ella le importa
y por eso no quiere
volver a besarla dulcemente.
Como antes,
ella siempre sueña
el intercambio de matices,
compartir los celajes,
acariciar los arreboles
y como Narciso
extasiarse en sus reflejos
en un espejo de agua
cuando muere el día...
Contarse los sueños
y alimentar cada uno los del otro...
Ella llora tendida en el prado
y la arboleda le susurra quedo
unos cantos suaves del ramaje...
Ella suspira y delira
por su amado el viento.
Ana Lucía Montoya R.
Enero 2009
la tarde lo espera...
No han vuelto a conversar
como en los viejos tiempos.
Piensa él que ya nada
a ella le importa
y por eso no quiere
volver a besarla dulcemente.
Como antes,
ella siempre sueña
el intercambio de matices,
compartir los celajes,
acariciar los arreboles
y como Narciso
extasiarse en sus reflejos
en un espejo de agua
cuando muere el día...
Contarse los sueños
y alimentar cada uno los del otro...
Ella llora tendida en el prado
y la arboleda le susurra quedo
unos cantos suaves del ramaje...
Ella suspira y delira
por su amado el viento.
Ana Lucía Montoya R.
Enero 2009
Como un saco deshilachado.
Privilegio a tus efluvios secretos
cuando llegan a mi destino.
Transforman los oscuros designios
que hacen tambalear a mi camino.
Sin ostentaciones ni heráldica
aventan los momentos fatales.
Sacuden la modorra mediocre
y es entonces que avisto el altar.
Ese, donde moras tú, sin saber
que llegas a vislumbrar
los inconfesos instantes
que acaban haciendo el mal.
Ahora la tormenta pasa
como evento deshilachado.
Como un saco arrugado
que ya no usaré nunca mas.
Oscar N. Galante
cuando llegan a mi destino.
Transforman los oscuros designios
que hacen tambalear a mi camino.
Sin ostentaciones ni heráldica
aventan los momentos fatales.
Sacuden la modorra mediocre
y es entonces que avisto el altar.
Ese, donde moras tú, sin saber
que llegas a vislumbrar
los inconfesos instantes
que acaban haciendo el mal.
Ahora la tormenta pasa
como evento deshilachado.
Como un saco arrugado
que ya no usaré nunca mas.
Oscar N. Galante
RIO.
El río corre,
como una loca danza de piernas.
Se escabullen las horas.
Se apagan las linternas.
El río se nubla con las oscuridades de mi corazón.
Fluyo y me río de mi corazón.
Busco ese trayecto entre partitura y queja.
Me llena el ruido de la decadencia.
La extensión urbana del lamento,
que se brutaliza en anejados conciertos.
Me vuelvo cruda, me vuelvo río.
Se pierden los destellos de una historia.
En la corriente que baja,
sin remedio corre hacia su final.
El río es corroído.
Corrompido.
Contaminado.
Es ahora mortal.
El río es de repente una mancha.
Cuando antes, inmensidad.
Amparo Carranza Vélez.
4 de Diciembre de 2008.
viernes, 29 de mayo de 2009
Lamento del hijo de Kerana
Tau y Kerana.
Como un lagarto cavernario, medio perro,
me asomo a donde están los frutos,
pero no puedo comer, yo velo el fruto
con hambre; me gustaría que me alimentara
el Ser que me parió, oh Kerana.
Como una serpiente enorme, a la orilla
de los ríos observo el agua, pero no puedo beber
sin que arruine mis palabras, como el loro
que olvidó quién es el Padre del Lenguaje.
Como una culebra cornuda soy el terror del campo
y huyen de mí. Sólo he querido llamar a mis hermanos.
Como un niño que tiembla, me duermo,
así como dormí, soñando perfecciones,
la que fue traicionado y ultrajada por causa de su soñar.
Como Kuripira, el feo, de enorme pene,
se me condena a estar solo; oveja monstruosa,
pecarí de las colinas me han llamado en la aldea
y en la montaña; perro de cementerio,
ladrido del agonizado, me dieron por tarea
para dejarme solo... entonces...
desde todas estas muertes gigantescas
me apresto a renacer; fecúndame pues para que no sea
yo, Teju Jagua, el de la verde piel
que se pudre sobre la fruta del hombre;
yo, Mbói Tu'i, no quiero ser ni loro ni culebra
donde exista un manantial.
Yo, Moñái, no quiero ser cornudo
ni niño, en siesta de indefensión, como Jasy Jatere
y mi madre, la hermosa; Kurupira, me indigna
mi fealdad y la malquerida fertilidad de la selva/
yo Ao Ao, no quiero ser pecarí del monte
ni como Luison, muerte inacabada
de los cemeterios, fecúndame en la muerte
de una vez y que muera el Tau
cuando abra mis ojos y me vista de vida
entre los hombres de buena voluntad.
Del libro «Lope de Aguirre y los paraísos soñados»
Carlos Lopez Dzur
jueves, 28 de mayo de 2009
Así.
Así, quiero ir cambiando mi vida, de un día a otro
Quiero reír como niña, quiero olvidar el dinero
Amarte con desesperación en cada noche, y despertarme sonriendo
Dejar de pensar en mañana, y disfrutarte de nuevo
Así nació este verso, de un día a otro
Porque antes de morirme, quiero decir que !! te quiero!!
Antes de que pase otro día quiero encontrarte de nuevo
Descubrir el sabor de tus besos, y el último rincón de tu cuerpo
Quiero dormir como hoy, y mañana?... quiero pensarte de nuevo!!
Gloria Eugenia Lemus.
Quiero reír como niña, quiero olvidar el dinero
Amarte con desesperación en cada noche, y despertarme sonriendo
Dejar de pensar en mañana, y disfrutarte de nuevo
Así nació este verso, de un día a otro
Porque antes de morirme, quiero decir que !! te quiero!!
Antes de que pase otro día quiero encontrarte de nuevo
Descubrir el sabor de tus besos, y el último rincón de tu cuerpo
Quiero dormir como hoy, y mañana?... quiero pensarte de nuevo!!
Gloria Eugenia Lemus.
miércoles, 27 de mayo de 2009
Mujer-Nube
Dibujo de Liliana Varela
Mansa e incansable
como la lluvia que la moja
deambula por el muelle
buscando inútilmente respuestas en el cielo.
El espiral de la soledad
se enreda entre sus pies
y trastabilla la cordura.
Se quiebra el bramido del mar
en el último soplo del viento
mientras ella se disipa junto con la niebla.
Su mirada insolente baja hasta la playa,
descubre su sombra espumosa en la arena
y unos pasos más allá
su cuerpo desnudo en la orilla
rodeado de velas y pájaros muertos.
Patricia Ortiz
Lo perdido
Escarbé memorias,
despedacé negras orquídeas
orbité mundos en holísticos seriales
friccioné la noche de los días
entre los dientes de la impotencia.
No lo hallé al final del arco iris
ni en aquel tiempo prestado
ni en la jauría angulosa del deseo.
Así
en la redención humeante del cigarro
me supe Zaratustra sintiendo
la inútil búsqueda
de algo…
que jamás había perdido.
Liliana Varela 2009
despedacé negras orquídeas
orbité mundos en holísticos seriales
friccioné la noche de los días
entre los dientes de la impotencia.
No lo hallé al final del arco iris
ni en aquel tiempo prestado
ni en la jauría angulosa del deseo.
Así
en la redención humeante del cigarro
me supe Zaratustra sintiendo
la inútil búsqueda
de algo…
que jamás había perdido.
Liliana Varela 2009
martes, 26 de mayo de 2009
A discreción...
Amor.
Noble flaqueza del espíritu
Cubre con tus destellos mi añoranza
No me dejes pasar por esta vida
Sin sentirme plagada de esperanza.
Quiero ver otros ojos que armoniosos
Se fundan con ardor a estos míos
Quiero que con pensamientos, pasiones y placeres
Aticemos unidos a tu sagrada llama.
Gloria Eugenia Lemus.
domingo, 24 de mayo de 2009
AGOTÉ LOS RECURSOS
Un suspiro deshojó amapolas,
fue tu amor…si se puede nombrar…
sin querer me has servido de lumbre.
Fuiste luz por dos días seguidos
y apagaste mi noche con rayos.
Agoté los recursos salobres
atorados en prismas benditos
pero tu sangre joven
desbordó en entusiasmo inaudito
y se fue con la prisa rastrera
por vientos aciagos
de un día sin verano.
El amor que va y que viene
se dirige a la cima
pero no toca el cielo
sino que al ras del suelo
su estrategia lamenta
la dicha peregrina
escribiendo poemas
como antídotos negros…
suicidados en magras
arenas heladas y cristales etéreos.
SUSANA RODRIGUES TUEGOLS
Copyright ©
fue tu amor…si se puede nombrar…
sin querer me has servido de lumbre.
Fuiste luz por dos días seguidos
y apagaste mi noche con rayos.
Agoté los recursos salobres
atorados en prismas benditos
pero tu sangre joven
desbordó en entusiasmo inaudito
y se fue con la prisa rastrera
por vientos aciagos
de un día sin verano.
El amor que va y que viene
se dirige a la cima
pero no toca el cielo
sino que al ras del suelo
su estrategia lamenta
la dicha peregrina
escribiendo poemas
como antídotos negros…
suicidados en magras
arenas heladas y cristales etéreos.
SUSANA RODRIGUES TUEGOLS
Copyright ©
sábado, 23 de mayo de 2009
Te llamabas
sí
que no te nombren
que seas sombra callada
en la libertad en que andas
yo te sé
indicio /ribera /agua clara
ahora
de qué te vale muerte
si aún no hay bufares
ni gritos de pájaros migrando
hasta el muro abierto de la nada
que mira hacia la sima de mi todo
de qué te vale
si todavía hay que recoger el verbo salobre
de mi voz ahogada en las arenas
de los mares ignotos del horizonte
que apenas diviso
sí
te llamabas
(llamo)
escape /salida/eco/ sueño
sueño/sueño
Migdalia B.Mansilla R.
Fecha: ¿Qué? ¿Cuándo ? ¿Por qué?
Mayo 20 de 2009
__._,_.___
viernes, 22 de mayo de 2009
Ese fantasma
Cuán lejanas están las lunas
y el ahogo tan cerca
atenazando la garganta.
La cobardía siempre encuentra excusa
para no enfrentar al sufrimiento
cara a cara con el sol.
Se multiplican las heridas
cuando el dolor madura
en las grietas de la piel
y el olvido –ese fantasma-
larva feroz que no crece,
nos quiebra,
nos demuele.
Patricia Ortiz
--
"Toda palabra llama a otra palabra. / Toda palabra es un imán verbal, / un polo de atracción variable / que inaugura siempre nuevas constelaciones. " Roberto Juarroz
NO FUISTE HECHA PARA MI
Tu palabra, señal distinta,
en exilio.
Desigual, separada
línea cruel:
que aguijonea la incógnita
de saberte mi mañana
a pesar de mi pesar
subsistes.
Dices:
Que no fuiste hecha para mí.
TEMO
He maltratado porcelanas
caminos llanos,
fue grande mi egoísmo
instauré cuadros
que no eran para mí.
Apague tus huellas
que caminaban
por la voz repetida
en tus oídos atravesados
por mis mentiras.
Guarismo e instrumento
casi amado, dilatado
cavidad divisoria.
Sentimiento y pasión
piso peregrino,
casi quieto,
jadeo estrecho:
mi hielo frenaba tus ojos.
Eras eje de mi vaivén
con tu voz casi muda
hoy hablas algo extraño
temo a un ruido infinito.
Sé que hay culpa
en mi estúpido corazón.
Y temo…
SANTOAMOR
en exilio.
Desigual, separada
línea cruel:
que aguijonea la incógnita
de saberte mi mañana
a pesar de mi pesar
subsistes.
Dices:
Que no fuiste hecha para mí.
TEMO
He maltratado porcelanas
caminos llanos,
fue grande mi egoísmo
instauré cuadros
que no eran para mí.
Apague tus huellas
que caminaban
por la voz repetida
en tus oídos atravesados
por mis mentiras.
Guarismo e instrumento
casi amado, dilatado
cavidad divisoria.
Sentimiento y pasión
piso peregrino,
casi quieto,
jadeo estrecho:
mi hielo frenaba tus ojos.
Eras eje de mi vaivén
con tu voz casi muda
hoy hablas algo extraño
temo a un ruido infinito.
Sé que hay culpa
en mi estúpido corazón.
Y temo…
SANTOAMOR
Vida
Desde la playa veo el origen
del majestuoso océano
pero jamás puedo observar
su perfecto final.
Acaso sea igual
de misteriosa la vida.
Veo su desarrollo
mas nunca su fin.
Vida que me haces
transcurrirte toda.
Será como tú quieras
cuando me abandones.
Oscar N. Galante
del majestuoso océano
pero jamás puedo observar
su perfecto final.
Acaso sea igual
de misteriosa la vida.
Veo su desarrollo
mas nunca su fin.
Vida que me haces
transcurrirte toda.
Será como tú quieras
cuando me abandones.
Oscar N. Galante
martes, 12 de mayo de 2009
CEGUERA
golpea la garúa
-arroja líneas cortantes-
hiere su palabra
-siempre reproche-
la ausente mirada
-ceguera improvisada-
le hace silenciar el maltrato
©Elisabet Cincotta
"De laureles y olivos" Ed. Mis Escritos/2008
"Las únicas muertes que el hombre conoce son aquellas a que se sobrevive." Macedonio Fernández
-arroja líneas cortantes-
hiere su palabra
-siempre reproche-
la ausente mirada
-ceguera improvisada-
le hace silenciar el maltrato
©Elisabet Cincotta
"De laureles y olivos" Ed. Mis Escritos/2008
"Las únicas muertes que el hombre conoce son aquellas a que se sobrevive." Macedonio Fernández
lunes, 11 de mayo de 2009
Y SÍ
Y si me hubiesen dicho
que uno más uno
era la matemática exacta
como este amor que me nace
para quererlo
no hubiese renegado de lo cartesiano.
Y si me hubiesen dicho
que la corriente alterna de la energía
que el río nos trae
y este amor efervescente
que no puede parar
y me arrastra y me arrastra
hubiese negado a Heráctilo sí…
Y si me hubiesen dicho que la sangre llora
esparcida en el círculo
con que lo invoco por vida
Y pudiendo trascender
me he convertido en Evaescencia
seca seca por su Adán.
Y que por mis venas corre el flujo
la furia bronca de ese hombre que me llama
desde el suspiro que da muerte
hubiese terminado con el Árbol de la Vida.
Pero aún queda ese Libro impronunciable
en el lomo de las caricias
las hojas que al pie no hemos caminado
y la vuelta atrás que nunca daremos.
Ese pozo insaciable de la alegría.
La noche nunca interminable
donde me invita a ser feliz,
con el destino placentero/doloroso
la mariposa sobre su dedo
hincándome en un día a la vez.
Fanny G. Jaretón
que uno más uno
era la matemática exacta
como este amor que me nace
para quererlo
no hubiese renegado de lo cartesiano.
Y si me hubiesen dicho
que la corriente alterna de la energía
que el río nos trae
y este amor efervescente
que no puede parar
y me arrastra y me arrastra
hubiese negado a Heráctilo sí…
Y si me hubiesen dicho que la sangre llora
esparcida en el círculo
con que lo invoco por vida
Y pudiendo trascender
me he convertido en Evaescencia
seca seca por su Adán.
Y que por mis venas corre el flujo
la furia bronca de ese hombre que me llama
desde el suspiro que da muerte
hubiese terminado con el Árbol de la Vida.
Pero aún queda ese Libro impronunciable
en el lomo de las caricias
las hojas que al pie no hemos caminado
y la vuelta atrás que nunca daremos.
Ese pozo insaciable de la alegría.
La noche nunca interminable
donde me invita a ser feliz,
con el destino placentero/doloroso
la mariposa sobre su dedo
hincándome en un día a la vez.
Fanny G. Jaretón
domingo, 10 de mayo de 2009
ESCUCHO TODAVIA
Escucho todavía esa voz empañada
por el moho del tiempo que acarrea la muerte.
Tiniebla entre tinieblas, la memoria
sujeta los corceles del pasado,
hábil jinete en lucha, duro espectro
que al olvido degüella de una sola estocada.
¿Hasta cuándo, pregunto, se sumarán los trozos
de aquello destrozado por la vida?
Long Ohni
por el moho del tiempo que acarrea la muerte.
Tiniebla entre tinieblas, la memoria
sujeta los corceles del pasado,
hábil jinete en lucha, duro espectro
que al olvido degüella de una sola estocada.
¿Hasta cuándo, pregunto, se sumarán los trozos
de aquello destrozado por la vida?
Long Ohni
Hay ojos........ .
Hay ojos verdes
tambien los hay celestes, y de otros colores
hay ojos que ven bien
tambien hay los que necesitan gafas, lentes y anteojos
Hay ojos que miran con abulia y aburrimiento
tambien hay ojos que miran con curiosidad y admiracion
hay ojos que miran con picardia o con ternura
y tambien estan los ojos capaces de desvestir
Pero los ojos mas lindos son ellos que
hacen brillar las mejillas y hacen sonreir
son los que embellecen a sus dueños
cuando miran con amor
Yossi May , diciembre2005
tambien los hay celestes, y de otros colores
hay ojos que ven bien
tambien hay los que necesitan gafas, lentes y anteojos
Hay ojos que miran con abulia y aburrimiento
tambien hay ojos que miran con curiosidad y admiracion
hay ojos que miran con picardia o con ternura
y tambien estan los ojos capaces de desvestir
Pero los ojos mas lindos son ellos que
hacen brillar las mejillas y hacen sonreir
son los que embellecen a sus dueños
cuando miran con amor
Yossi May , diciembre2005
lunes, 4 de mayo de 2009
Este era él
Este era él.
A quien acaba de morir
no lo reclama ninguno, no importó a nadie.
Ni por un segundo se le tuvo en cuenta
(¿por qué ahora?... no hay quien lo llore
y gima por él si no fue de veras inservible.. .)
No tuvo empleo; eso fue todo. No se educó.
(En su villa, jamás hubo una escuela).
En su villa todos son como él.
Donde nació no se educa ninguno.
Es una aldea de hambrientos y se vive
en la calle, sin techo; sólo moscas se enciman
a la piel como cobijas; sólo cielos oscuros
disimulan que son seres en el olvido.
Donde nació las aguas están contaminadas
ya pronto, se especula, que el aire será impuro
y todo por culpa de esa empresa
que viene a echar aquí sus desperdicios.
Son unas largas, extensas tuberías,
anchas bocas de tóxico y hedientes escurrajos;
Bocas lamientes desde millas por aldeas
de privilegio, donde la gente, al menos,
mal come, toma un baño y trabaja
hasta extenuarse la mitad de los días.
Quien acaba de morir no pudo.
Este era él: uno de los aldea pobre.
De Cuaderno de amor a Haití
Carlos Lopez Dzur
A quien acaba de morir
no lo reclama ninguno, no importó a nadie.
Ni por un segundo se le tuvo en cuenta
(¿por qué ahora?... no hay quien lo llore
y gima por él si no fue de veras inservible.. .)
No tuvo empleo; eso fue todo. No se educó.
(En su villa, jamás hubo una escuela).
En su villa todos son como él.
Donde nació no se educa ninguno.
Es una aldea de hambrientos y se vive
en la calle, sin techo; sólo moscas se enciman
a la piel como cobijas; sólo cielos oscuros
disimulan que son seres en el olvido.
Donde nació las aguas están contaminadas
ya pronto, se especula, que el aire será impuro
y todo por culpa de esa empresa
que viene a echar aquí sus desperdicios.
Son unas largas, extensas tuberías,
anchas bocas de tóxico y hedientes escurrajos;
Bocas lamientes desde millas por aldeas
de privilegio, donde la gente, al menos,
mal come, toma un baño y trabaja
hasta extenuarse la mitad de los días.
Quien acaba de morir no pudo.
Este era él: uno de los aldea pobre.
De Cuaderno de amor a Haití
Carlos Lopez Dzur
La noche
Noche silenciosa, fuente de nostalgias
hilos que hilvanan estrellas como telarañas.
mirada perdida en el firmamento
buscando la luz detrás del alba.
Desencadenados pensamientos
uniendo el ayer y el mañana,
Inmensa paz invade la soledad
sentimientos vienen y van
creando y asesinando fantasmas
dejando los restos en el fondo del alma.
en los ojos la lluvia,
en las manos la nada.
en un poema solo... palabras
MORUS
Mayo 2009
sábado, 2 de mayo de 2009
Sin lágrimas
.
.
.
.
.
.
.
.
Sin lágrimas
Arribó a este planeta con luces doradas,
ilusiones que no se concretaron.
Bebió placeres y malgastó momentos
hasta menospreciar la vida.
Amó con toda garra
y recogió traiciones.
Esparció semillas de ilusiones
y estas fueron infecundas.
Tus lágrimas formaron
un río hondo sin escape.
Saltaste al vacío
desafiando el regalo de Dios,
este excusó tu vanidad
otorgándote una segunda vez.
Abriste tus ojos sin noción
del tiempo transcurrido,
enjugaste muchas
lágrimas de arrepentimiento.
© Kellypocharaquel. -
Arribó a este planeta con luces doradas,
ilusiones que no se concretaron.
Bebió placeres y malgastó momentos
hasta menospreciar la vida.
Amó con toda garra
y recogió traiciones.
Esparció semillas de ilusiones
y estas fueron infecundas.
Tus lágrimas formaron
un río hondo sin escape.
Saltaste al vacío
desafiando el regalo de Dios,
este excusó tu vanidad
otorgándote una segunda vez.
Abriste tus ojos sin noción
del tiempo transcurrido,
enjugaste muchas
lágrimas de arrepentimiento.
© Kellypocharaquel. -
viernes, 1 de mayo de 2009
Eco
Se me parte la mañana
y sus celestes rosados
Entre alas de libélulas
De tu aliento dorado
*
Escucha el susurro.
Mi corazón
apenas late.
En el compás de mi pecho
ya no hay nadie,
ni tan siquiera mi sangre.
Sólo suena
Sólo tañe
Un
SOS VOS
sos vos
vos
vos
Diana Bracamonte
y sus celestes rosados
Entre alas de libélulas
De tu aliento dorado
*
Escucha el susurro.
Mi corazón
apenas late.
En el compás de mi pecho
ya no hay nadie,
ni tan siquiera mi sangre.
Sólo suena
Sólo tañe
Un
SOS VOS
sos vos
vos
vos
Diana Bracamonte
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